LA ÉTICA DEL CUIDADO
Tras la lectura que realicé el otro día sobre la ética del
cuidado en la educación física, y el debate realizado en clase, quise ampliar
un poco el texto leído, sobre todo explicando la escala de desarrollo moral.
Carol Gilligan fue discípula de Kohlberg en la Universidad
de Harvard, y estaba muy familiarizada con sus investigaciones. Sin dudar de la
importancia de la exposición sobre el desarrollo moral que hacía su maestro,
observó en esta algunas deficiencias:
- Realizó sus investigaciones sólo sobre sujetos
del sexo masculino
- Usaba dilemas morales hipotéticos, que podrían
estar sesgados en su planteamiento y provocar desviaciones en las respuestas de
los sujetos.
- En la escala final del desarrollo moral de
Kohlberg las mujeres alcanzaban resultados inferiores a los hombres.
Ante estas deficiencias, Gilligan realizó un nuevo estudio
en el cual los sujetos eran mujeres y los dilemas que se proponían eran
cuestiones reales, como el aborto. El resultado fue el descubrimiento de un
modelo ético diferente al propugnado por Kohlberg. Si éste propugnaba como
modelo de desarrollo moral una ética de la justicia, en los estudios de
Gilligan salió a la luz la ética del cuidado.
Gilligan planteó que el problema fundamental de los estudios
de Kohlberg fue su limitación a sujetos masculinos, la cual produjo una
desviación de los resultados motivada por la distinta educación vital y moral
que recibimos los hombres y las mujeres en la sociedad. Los hombres nos moveríamos
en lo formal y abstracto, en el respeto a los derechos formales de los demás,
en el ámbito individual y en las reglas. Las mujeres se moverían en lo
contextual, en la responsabilidad por los demás, en las reacciones y en una
concepción global y no sólo normativa de la moral.
A partir de eta concepción, Gilligan elaboró un cuadro del
desarrollo moral en el ámbito de la ética del cuidado que corresponde en
grandes líneas al cuadro que propuso Kohlberg en al ámbito de la ética de la
justicia. Aunque formalmente los tres niveles de desarrollo que propone
Gilligan se estructuran sobre la dinámica de los de Kohlberg, su contenido es
muy diferente. Esto tiene que ver con las diferencias básicas entre estas
éticas: ambas defienden la igualdad, pero la ética de la justicia pone el
acento en la imparcialidad y la universalidad, lo que elimina las diferencias,
mientras que la del cuidado pone el acento en el respeto a la diversidad y en
la satisfacción de las necesidades del otro. Los individuos de la ética de la
justicia son formalmente iguales, han de ser tratados de modo igualitario, los
de la ética del cuidado son diferentes e irreductibles y no deben ser dañados.
Desde este punto de vista se entenderá la diferente
orientación que la ética del cuidado de Gilligan da al desarrollo moral:
Primer nivel
|
Atención al Yo para asegurar la
supervivencia: el cuidado de sí misma.
|
Transición
|
Consideración del planteamiento del primer nivel
como egoísta.
|
Segundo nivel
|
Conexión entre el Yo y los
otros por medio del concepto de responsabilidad: la atención a los
demás y la relegación de sí misma a un segundo plano.
|
Transición
|
Análisis del desequilibrio entre autosacrificio y
cuidado, reconsideración de la relación entre el Yo ylos
otros.
|
Tercer nivel
|
Inclusión del Yo y de los
otros en la responsabilidad del cuidado. Necesidad de equilibrio
entre el poder y el cuidado de sí misma, por una parte, y el cuidado a los
demás por la otra.
|